Por Brian Orsak

El gobierno ruso no podrá ejecutar ningún fallo contra el Bank of New York Mellon en el juicio por US$22.500 millones por supuesto fraude y lavado de dinero, informaron los ejecutivos del banco.

El Servicio Ruso de Aduanas demandó al banco bajo la ley estadounidense de Estafas y Organizaciones Corruptas (RICO, por sus siglas en inglés), en Mayo pasado por derechos aduaneros que no han sido pagados,  luego de que un empleado cómplice del banco ayudara a transferir más de US$7.000 millones desde Rusia mediante transferencias ilícitas. El caso está siendo juzgado en un tribunal ruso.

El banco ha dicho que las afirmaciones de Rusia de que la entidad es responsable por lavado no son válidas. El lunes, funcionarios del banco fueron incluso más lejos, al decir que cualquiera sea el resultado del caso, el banco no estaría obligado a pagar los daños y en consecuencia procedería a proteger sus activos en el exterior.

“Confiamos en que cualquier decisión adversa dispuesta por el tribunal no será ejecutable dadas las medidas de protecciones legales y financieras sólidas que aplicamos”, señaló el director ejecutivo del Bank of New York Mellon, Robert Nelly, en una conversación telefónica con los accionistas y analistas financieros.

El banco, que ha solicitado el rechazo del caso, está protegido mediante la denominada regla de los ingresos, una doctrina del derecho anglosajón que impide la ejecución de sentencias legales basadas en leyes impositivas de otro país, explicó el lunes Jonathan Schiller, abogado que representa al banco.

El banco invocaría la regla para proteger los activos que tiene en países en los que tiene importantes intereses, informó, agregando que el Servicio Ruso de Aduanas sugirió que reclamaría bienes de las operaciones del banco en Abu Dhabi y Singapur.

En una declaración realizada el 1 de Abril, el gobierno ruso señaló que Richard Bove, analista de la firma Punk Ziergel & Co., manifestó que de acuerdo con los precedentes existentes en los tribunales de los Estados Unidos y Europa, Rusia podría cobrar si hubiere un fallo a su favor.

Sin embargo, los analistas que participaron en la conversación telefónica mantenida por la compañía el lunes pusieron en duda la capacidad de Rusia para hacer eso. “No me parece que eso vaya a ser posible”, dijo Glenn Schorr, analista del UBS que sigue los temas del banco.

El Servicio Ruso de Aduanas puede verse aún con más tropiezos por el plazo de prescripción establecido para los casos juzgados bajo la ley RICO, que es de cuatro años como máximo, de acuerdo con lo indicado por Thomas Walker, abogado que asesora en casos vinculados a la ley RICO en la firma Cosho Humphrey LLP, destacando que la demanda fue presentada casi una década después de que se descubriera la operación de lavado.

Es más, si el gobierno ruso ganara el caso, posiblemente tendría que revisar la decisión ante los tribunales de EE.UU., dijo Walker, quien describió al caso como “muy extraño”. “Normalmente, uno presenta la demanda en el lugar donde reside el demandado”, dijo.
Origen del problema

Los problemas surgieron para el banco en 1999, cuando los investigadores federales estadounidenses informaron que una empleada del banco, Lucy Edwards y su esposo Peter Berlin, un empresario ruso, habían ayudado a lavar fondos para el banco ruso denominado Depozitarno Kliringovy Bank a través de cuentas en el Bank of New York Mellon.

En 2004, el Bank of New York Mellon pagó una multa de US$38 millones a los reguladores financieros de Estados Unidos por deficiencias relacionadas con el cumplimiento antilavado de dinero. La institución no fue acusada del delito de lavado de dinero.

Un caso penal en EE.UU. contra la pareja fue demorado durante más de un año debido a la reubicación de los recursos que hubo que realizarse después de los ataques terroristas del 11 de Septiembre de 2001, informó a Money Laundering Alert en 2003 un funcionario de control legal cercano a la investigación.

En Julio de 2006, un juez federal ordenó a la pareja que pagara US$725.000 en multas y los condenó a seis meses de arresto domiciliario y cinco años de libertad condicional.  Los fiscales analizaron la posibilidad de iniciar un juicio criminal contra el banco, pero no impulsaron la medida antes de que se cumpliera el plazo de prescripción, dijo el funcionario.

El Bank of New York tiene pocos bienes en Rusia, donde mantiene una pequeña oficina para realizar pequeñas operaciones de banca corresponsal y de administración de bienes, y donde sólo hay cinco empleados, indicaron los funcionarios del banco. “Estoy seguro que tienen un par de escritorios y sillas”, Matt Bivens, vicepresidente ejecutivo y asesor jefe de litigios del banco.

Kelly, quien dijo que el banco no tenía planes para dejar de realizar operaciones en Rusia, estimó que los ingresos provenientes de Rusia representan menos del 1% de los ingresos totales del banco.

En la audiencia realizada el lunes, el Bank of New York Mellon fue ordenado a entregar documentos que contienen el detalle de las transferencias. El juez que preside el tribunal pospuso la siguiente audiencia hasta el 13 de Mayo.