Los esfuerzos del gobierno de Chile para identificar y recuperar los fondos de su ex dictador Augusto Pinochet dieron un inesperado fruto el mes pasado: el Banco Santander Internacional en Miami acordó depositar US$1 millón en una cuenta en Chile establecida para recibir los fondos recuperados del ex dictador.
El dinero fue mantenido en dos cuentas del Santander a nombre de una compañía offshore que había sido establecida en beneficio de Pinochet por uno de sus testaferros, el abogado Oscar Aitken.
Santander es uno de los cuatro bancos internacionales de Miami que fueron obligados en julio por la Jueza federal del distrito Joan Lenard a entregar los registros al Consejo de Defensa del Estado (CDE) y a brindar testimonio de sus manejos de las cuentas de Pinochet y sus numerosos testaferros. Dos fuentes cercanas al procedimiento del gobierno chileno en Miami, que pidieron no ser identificadas, dijeron a Lavadodinero.com que el Santander había devuelto el dinero.
La acción del gobierno chileno para recuperar los fondos en poder de Pinochet es única en el corrupto mapa latinoamericano. El CDE y el juez chileno Sergio Muñoz, han iniciado acciones legales y una investigación en más de una docena de países donde se cree que Pinochet había ocultado su riqueza hasta entonces desconocida.
Investigación del Senado de EE.UU. inició el camino
Los fondos ocultados por el ex dictador y su relación con Aitken habían sido descubiertos en una investigación realizada por el Subcomité Permanente de Investigaciones del Senado de EE.UU., encabezada por los Senadores Carl Levin, de Michigan, y Norman Coleman, de Minnesota. La investigación se centró en el banco Riggs, en Washington, D.C., que mantuvo una profusa actividad bancaria con las cuentas de embajadas extranjeras en la capital estadounidense.
La embajada chilena fue una de las más de 100 misiones extranjeras que tenían cuentas en el banco Riggs. Pinochet y su familia fueron una parte separada del paquete. El panel del senado descubrió US$8 millones en cuentas en Riggs controladas por Pinochet.
Los escandalosos resultados de la investigación del Senado tomaron por sorpresa a Chile y culminaron en la investigación global del CDE. La iniciativa descubrió los numerosos pseudónimos que utilizaba Pinochet así también como sus trucos y fachadas para el lavado, algunos de los cuales fueron facilitados por el banco Riggs.
Las cuentas del Santander que tenían fondos por US$ 1 millón estaban a nombre de Eastview Finance, una compañía offshore de las Islas Vírgenes Británicas. Santander heredó las cuentas del banco Coutts & Co. cuando compró el portafolio de banca privada que esa institución tenía en Miami en julio de 2003.
Banco reacio
El subcomité del Senado informó que el Santander había declarado al panel que no había sido informado durante la diligencia debida practicada en oportunidad de la compra de Coutts que las cuentas controladas por Aitken eran en beneficio de Pinochet.
El Santander declaró al Senado que cerró todas las cuentas que tenía Aitken a fines de 2004, salvo una, después de que tomó conocimiento de su relación con Pinochet. La cuenta que permaneció abierta fue incluida en un proceso de quiebra judicial y su actividad fue congelada mientras duró el mismo.
En agosto, luego de vender una inversión de Pinochet, el dinero fue enviado a su cuenta en Santander, de acuerdo con una fuente informada. Santander informó al CDE acerca del dinero y transfirió US$1 millón a una cuenta especial en Chile.
Banqueros con “más conocimiento” deben declarar
Las órdenes del tribunal federal en Miami y Nueva York, obtenidas por el bufete de abogados de EE.UU. Greenberg Traurig para el CDE, también obligan al Banco Espirito Santo, al Banco de Chile y al ahora difunto Riggs Bank en Miami, a entregar prácticamente todos los registros y documentos relacionados con Pinochet. Aún se encuentra pendiente una petición presentada ante el tribunal federal de Washington, D.C. para la presentación de los registros del Riggs.
Los cuatro bancos deben poner a disposición para declaraciones a aquellos funcionarios bancarios que “tengan más conocimientos” sobre las cuentas.
Los problemas del Banco de Chile en EE.UU. pueden no haber finalizado todavía. Ya fue objeto de informes críticos presentados por la Oficina de Contralor de la Moneda y el Directorio de la Reserva Federal por sus deficiencias con las cuentas. (Lavadodinero.com Marzo 2005).
En agosto, Banco de Chile declaró ante la Comisión de Bolsa y Valores que la Red de Control de Crímenes Financieros está “evaluando si es apropiado aplicar una sanción civil monetaria…”.
La ley de EE.UU. y no el tratado, agilizó el resultado
Las órdenes del tribunal federal fueron obtenidas por el CDE bajo una ley de EE.UU. que permite a los tribunales de otra nación solicitar asistencia judicial de EE.UU. (Título 28, USC Sec. 1782). El abogado de la firma Greenberg Traurig, Luis O’ Naghten, dijo, “Es tanto más rápido invocar dicha ley que la Convención de La Haya o cartas rogatoria, las que podrían demorar varios meses…Esta ley brinda a los gobiernos….acceso a la presentación de evidencia de registros en Estados Unidos que de otra forma sería casi imposible obtener”.
El CDE no hizo comentarios sobre el caso. El abogado de la firma Greenberg Traurig, Pedro Martínez-Fraga, quien encabeza la representación del CDE, declinó hacer comentarios. Fernando Pérez-Hickman, gerente general de la oficina de Miami del Banco Santander, no devolvió nuestras llamadas.




