La esposa y una de las hijas del ex dictador chileno Augusto Pinochet obtuvieron el jueves una importante victoria en una corte de apelaciones de Chile al lograr la revocatoria del procesamiento en la causa de evasión fiscal relacionada con la investigación del caso Riggs.

Lucía Hiriart y María Verónica Pinochet estaban incluidas en una querella por parte de la agencia de rentas de Chile (Servicio de Impuestos Internos—SII) contra Augusto Pinochet. El juicio comenzó gracias a las investigaciones del Senado de Estados Unidos que descubrieron millones de dólares en el extranjero pertenecientes al ex dictador y su familia, entre otros, en el Banco Riggs de Washington. La agencia decidió denunciarlos por no haber declarado esos grandes ingresos.


En una votación dividida de dos jueces contra uno, la Quinta Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago resolvió dejar sin efecto el procesamiento contra ellas por autoras de evasión fiscal (Lucía Hiriart sigue procesada por complicidad en las declaraciones incompletas de su esposo). La razón es que el juez carece de jurisdicción para levantar cargos y juzgarlas, según la corte de apelaciones. Su competencia le permite investigar a Pinochet pero no a su esposa e hija


La corte de apelaciones dictaminó que en el caso Riggs el juez Cerda no podrá indagar delitos tributarios que no tengan que ver directamente con Pinochet. Anula así los procesamientos por declaraciones maliciosamente incompletas de impuestos de unos US$850.000 a Lucía Hiriart, esposa del ex gobernante, y a su hija por unos US$1.000.


A la resolución podría seguir el alzamiento de los embargos decretados contra la esposa y la hija del ex dictador y, con ello, retornar el dinero que fue congelado por el ministro Cerda y su antecesor, Sergio Muñoz, quien actualmente se desempeña como juez de la Corte Suprema de Chile.


La decisión se tomó con el voto en contra de un juez de la corte, Haroldo Brito, quien estuvo a favor de mantener el procesamiento que pesaba contra las mujeres como autoras de evasión tributaria. El magistrado estimó que con las pruebas que consideró Cerda bastaba para acreditar la “existencia de los delitos tributarios de omisión de declaraciones obligatorias de impuestos y la autoría de ambas contribuyentes”, según la resolución de la corte.


Lucía Hiriart sigue procesada por complicidad en las declaraciones incompletas de su esposo, mientras que su hija Verónica continúa encausada por adulteración de pasaportes.


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