En la mañana del 21 de junio todo lucía normal en la zona aduanera del terminal del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar, ubicado en el Estado Vargas (Venezuela). Dos sujetos se presentaron ante las autoridades de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) para reclamar dos cargamentos de rollos de cable de fibra óptima procedentes de México y Honduras. ¿Por qué una empresa venezolana importaría estos cables desde estos países y no desde un mercado primario del producto? La respuesta es simple: porque los carretes traían en su interior US$ 3 millones en efectivo de procedencia ilícita.

La carga de fibra óptica había llegado al litoral venezolano en vuelos de la aerolínea colombiana Avianca, procedente de México y Honduras los días 17 y 21 de julio. Los cargamentos eran pertenecientes a las empresas Coinser C.A. y Honduras C.A.

El método

Fuentes ligadas a las investigaciones señalaron que en el interior de los carretes de cable los billetes se encontraban escondidos en pequeños paquetes. Los detenidos –un ex funcionario de la GNB, Videxo Gregorio Montilla, y un policía municipal de Vargas, Luis Antonio Farias- serían encargados de retirar el cargamento en la aduana como representantes de la empresa Manan Mangueras C.A. Luego la carga sería trasladada hasta Colombia por vía terrestre con un camión cava 350.

Los investigadores consideran que el dinero es procedente de la venta de drogas en Estados Unidos y México. Una parte ya había sido trasladada a Honduras en una primera etapa del proceso de tráfico de efectivo.

Los fiscales del ministerio público venezolano acusaron a los 4 involucrados por la presunta comisión de los delitos de legitimación de capitales doloso, operación de ilícitos cambiarios y asociación para delinquir. Adicionalmente, los representantes del MP solicitaron medidas de prohibición de enajenar y gravar bienes, así como la congelación de las cuentas bancarias de los referidos hombres.

Claves del caso

-Una empresa venezolana importa el mismo tipo de fibra óptica desde dos países distintos.

-Uno de los cargamentos es procedente de Honduras, un país que no se caracteriza por exportar este tipo de productos.

-Ambos cargamentos llegaron a través de una aerolínea colombiana, a pesar de que ninguno era procedente de Colombia.