Un juez federal de distrito de Estados Unidos condenó a prisión a dos ex gerentes del Bank of China y a sus esposas por robar fondos y lavar más de US$485 millones.

El juez federal de distrito, Philip Pro, condenó la semana pasada a Xu Chaofan a 25 años de prisión y a Xu Guojun a 22 años, mientras que sus esposas Kuang Wan Fang y Yu Ying Yi fueron sentenciadas a cumplir 8 años en reclusión. Además, los cuatro sentenciados deberán restituir US$482 millones.


En agosto pasado, la corte de Nevada encontró culpable a los indiciados de los cargos de lavado de dinero, fraude, transporte de propiedad robada, fraude postal y fraude con visas. Los fiscales dijeron que los dos hombres trabajaban con un tercer ex gerente del Bank of China, Yu Zhendgong, en un esquema elaborado para defrauder al banco central.


Según señalan los documentos de la corte, la metodología del fraude consistía en que los ex gerentes del banco colocaban fondos en cuentas de compañías pantalla en Hong Kong, en cuentas bancarias personales y en cuentas de inversión en los Estados Unidos y Canadá. Ellos eran asistidos por sus esposas, que desviaban el dinero desde el Bank of China a través de transferencias, faxes, telegramas y cheques, según los fiscales.


Entre noviembre de 1999 y octubre de 2001, los individuos depositaron la mayor parte del dinero robado en casinos de Las Vegas, incluidos el Caesar’s Palace y el Paris Casino en Las Vegas, de acuerdo con lo informado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.  Los investigadores dijeron que al menos unos US $2 millones fueron lavados a través de los casinos.


Las autoridades estadounidenses arrestaron a Xu Chaofan, Xu Guojun, Kuang Wan
Fang y Yu Ying Yi en octubre de 2004. El tercer ex gerente del banco, Yu Zhendong, se declaró culpable de fraude en febrero de 2004 y regresó voluntariamente a China, donde fue condenado por malversación, según una declaración del Departamento de Justicia


En 2007, la Red de Control de Crímenes Financieros del Departamento del Tesoro de los EE.UU. publicó una regla final que exceptuaba a los casinos de presentar reportes de operaciones sospechosas sobre premios en máquinas tragamonedas y terminales de video de loterías. Los casinos fueron incluidos por primera vez en las reglas antilavado de dinero cuando se promulgó la Ley USA Patriot.