El Grupo de Acción Financiera (GAFI) publicó una nueva guía sobre cómo los países pueden identificar mejor y congelar bienes vinculados al financiamiento del terrorismo. El documento especifica las medidas mínimas que pueden aplicar las jurisdicciones para asegurar que las políticas incluyen la aplicación “sin demora” del congelamiento de bienes de individuos sancionados, para prohibir que los fondos estén a su disposición y obligando al reporte de bienes terroristas a las autoridades con facultades para congelar bienes, indicó el organismo antilavado en su guía “Mejores Prácticas Internacionales: Congelamiento de Bienes”.

La guía tiene como objetivo ayudar a que las jurisdicciones implementen la Resolución 1267 y la Resolución 1373 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre congelamiento de bienes terroristas. Señala que los países que carezcan de programas eficientes sobre congelamiento de bienes están “socavando” de manera importante sus esfuerzos contra el terrorismo.


El informe también señaló que la implementación efectiva de las medidas contra el financiamiento del terrorismo requiere que las autoridades financieras, de inteligencia y de control legal de un país trabajen de juntas e integren estas medidas como parte de una política más amplia contra el terrorismo.


Para tal fin es necesario que los gobiernos “identifiquen los organismos que tendrán la responsabilidad de coordinar y promover la implementación del programa de congelamiento de bienes”. Además, es necesario que las agencias gubernamentales “compartan efectivos canales de comunicación” y tengan “acceso a la información necesaria para identificar y hacer designaciones efectivas”


En relación al término “sin demora”, el organismo explica que “las posesiones deben ser congeladas al tener fundamentos “Razonables o una base razonable para sospechar o creer que una persona o entidad es terrorista, o quien financia el terrorismo o es una organización terrorista”.


GAFI también señala que la lucha al tener un programa efectivo de congelamientos de fondos, se dificulta el accionar de las redes y grupos que apoyan las actividades subversivas, impulsando a los terroristas “a buscar métodos más costosos y de mayor riesgos para financiar sus actividades”.


La guía, que reemplaza a la publicada en 2003,  tiene como objetivo cumplir con las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y apunta a mantener programas transparentes de sanciones que reconozcan los derechos de terceros inocentes, indicó el GAFI.