La Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) de Argentina realizó cambios de última hora al régimen de repatriación y blanqueo de capitales, a pocas semanas de que finalice el plazo para que los interesados se unan al programa mediante el cual el gobierno gaucho busca estimular la inversión nacional.
Mediante la Resolución 2650, el gobierno argentino estableció que quienes no hayan invertido el dinero repatriado antes del 31 de este mes, deberán depositar los fondos en una cuenta especial exenta del impuesto a los débitos y créditos, pero con ciertas condiciones en el manejo del dinero.
La normativa establece que el dinero repatriado que vaya a ser invertido en el sector de los bienes raíces entre septiembre de 2009 y agosto del próximo año, deberá ser declarado ante las autoridades antes de que finalice el presente mes de agosto. En ese caso, el gobierno sólo cobrará un 1% de impuestos.
La AFIP también precisó que por lo menos el 30% del dinero repatriado deberá ser invertido antes de agosto de 2010, mientras que el 70% restante tendrá que ser utilizado en el sector de bienes raíces en un plazo adicional de 2 años.
El organismo argentino aclaró que en caso de que los inversionistas no utilicen el dinero para el fin declarado, tendrá que pagar los impuestos omitidos, más los intereses y una multa por no cumplir con lo establecido en el régimen de repatriación. Ante tal situación, las instituciones financieras no tendrán ninguna responsabilidad por el incumplimiento de los depositantes, quienes en cualquier momento podrán utilizar su dinero.
Ahora bien, si entre marzo de 2009 y agosto de 2009 el contribuyente utilizó los fondos para la adquisición de inmuebles nuevos o usados o bienes de uso productivos, la declaración deberá hacerse antes del 31 de agosto y se pagará el 1% de impuestos.
De esta forma, el gobierno busca que quienes están blanqueando el dinero mediante este programa realmente cumplan con su compromiso de invertir en sectores productivos de la economía argentina.
Vale la pena destacar que según lo establecido en el régimen de repatriación y blanqueo aprobado el pasado mes de diciembre de 2008, el capital transferido a instituciones financieras argentinas desde jurisdicciones del exterior pagará el 1% si se destina a la compra o construcción de inmuebles, nuevos o usados, inversiones agroganaderas, industriales, turismo o de servicios en el país. Estas inversiones no pueden ser vendidas o transferidas en un plazo de 2 años, de lo contrario deberán pagar los impuestos omitidos más los intereses.
En el caso de que los capitales transferidos sean utilizados para la compra de títulos públicos, la alícuota es del 3%, aunque si se venden antes de los 24 meses se debe pagar un 5% adicional. Pero si los capitales blanqueados no tienen un destino específico, el impuesto será del 6%.
En el sector turístico, el dinero repatriado podrá ser invertido en hoteles, hosterías, cabañas y departamentos de tiempo compartido. También las inversiones en el sector del transporte relacionado al turismo califican para obtener los beneficios impositivos del programa de repatriación.
Aquellos capitales que sean invertidos en agencias de viaje y en negocios de venta al detal de antigüedades, artesanías, plata y cuero, entre otros, también gozarán de la tasa preferencial de impuesto. Los restaurantes, cantinas, cafés, bares, confiterías, salones de baile y discotecas también fueron incluidos dentro del régimen de beneficios.
El programa de repatriación entró en vigencia el pasado 2 de marzo y finalizará este 31 de agosto.




