Los representantes de dos industrias que operan en los márgenes de la industria de servicios financieros se presentaron en la Conferencia sobre Cumplimiento de Lavado de Dinero de la Asociación de Banqueros de EE.UU. y de la Asociación de Abogados de EE.UU. realizada en Washington, D.C., en un esfuerzo por convencer a los bancos de que no son fuentes posibles de exposición al lavado de dinero.
Tal vez temerosos de sufrir el mismo destino que los negocios de servicios monetarios, los representantes del Comité de Vigilancia de Joyeros y la Asociación Nacional de Prestamistas se dirigieron a los asistentes acerca de los resguardos existentes en la legislación vigente y la estabilidad histórica de sus respectivas industrias.
La profesora de derecho de la Universidad de Indiana, Sarah Jane Hughes, hablando en nombre de la industria de préstamos, repasó los requisitos regulatorios a los que se enfrentan los prestamismtas que ya les obligan a identificar a sus clientes y a reportar las transacciones en efectivos a las agencias de cumplimiento legal.
Destacando que el préstamo promedio en los negocios de préstamos de EE.UU. es de alrededor de US$60, la Sra. Hughes agregó, “Los fondos son pagados generalmente en efectivo – lo contrario de lo que quiere el lavador de dinero. Los fondos de préstamos más grandes posiblemente sean abonados con cheque, lo que crea un rastro en papel”.
Cecilia L. Gardner, presidente del Comité de Vigilancia de Joyeros, dijo que la imposición de nuevas obligaciones antilavado de dinero sobre los joyeros y vendedores de metales preciosos ha sido difícil, “pero estamos haciendo lo posible para alentar su cumplimiento”.
Los nuevos requisitos, dijo, significan que la industria debe considerarse a sí misma en una forma que no lo había hecho en el pasado – a través de la inclusión de funcionarios de cumplimiento y programas de capacitación de empleados.
Ella les previno a los banqueros que no apliquen “las expectativas de sus propias obligaciones de cumplimiento” a la industria, agregando que “no todos son de riesgo alto”.




