Por Brian Monroe.
La batalla entre los gerentes de negocios acosados por la caída de las ganancias y el personal de cumplimiento que debe analizar cada aventura financiera para evitar posibles problemas regulatorios ha empeorado durante la época de crisis que atraviesan las instituciones financieras estadounidenses y esto, seguramente, es un problema que enfrentan también las empresas latinoamericanas.
Los inspectores bancarios de la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC por sus iniciales en inglés) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos han visto un aumento en las citaciones emitidas a las instituciones financieras por permitirle a la gerencia de negocios tener mayor influencia y poder de decisión que el personal de prevención antilavado de dinero, afirmó Dan Stipano, asesor adjunto de la dirección del organismo durante un evento organizado por ACAMS (Asociación de Profesionales Certificados en Antilavado de Dinero).
En mayo, varios bancos fueron citados por violaciones a la Ley de Secreto Bancario, porque el personal de cumplimiento ALD “hizo su trabajo y advirtió sobre posibles problemas, pero la forma en como esos bancos están estructurados puso a la gerencia de la línea de negocios en una posición de dominio”, dijo Stipano, quien destacó que esta situación es “frecuente”.
La tensa situación -que es ya una vieja disputa que enfrentan los departamentos de cumplimiento- se ha visto exacerbada durante los últimos dos años, particularmente en bancos estadounidenses pequeños e instituciones financieras extranjeras, según afirmó un consultor ALD que ha trabajado con este tipo de problemas. Los bancos han permitido que los gerentes de negocios tengan la palabra final acerca del cierre de cuentas y de la presentación de reportes de operaciones sospechosas (ROS), indicó el experto, quien pidió mantener su nombre en reserva.
Algunos departamentos de cumplimiento que vieron disminuir sus recursos económicos perdieron a personal con amplia experiencia, como resultado de una especie de lucha política interna entre los gerentes ALD y los de negocios. El consultor explicó que los empleados que ocuparon las vacantes fueron más propensos a aceptar los nuevos negocios cuando sintieron la presión de la gerencia comercial. “Ante tantos recortes para los bancos, algunas instituciones han buscado personal de cumplimiento que no sea tan fuerte y que permita los negocios con más libertad”.
Estos problemas de cumplimiento siguen aumentando y están presentes en cientos de pequeños y medianos bancos que enfrentan problemas económicos. Desde 2008, en Estados Unidos cerca de 400 bancos han sido cerrados por los reguladores, según las cifras de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos.
Algunos casos
Desde enero de 2010, los reguladores federales han señalado a seis bancos por violaciones ALD relacionadas a como los bancos controlan las operaciones comerciales.
En julio de este año, la Reserva Federal ordenó al Royal Bank of Scotland fortalecer su consejo de administración y supervisión de cumplimiento ALD y de las operaciones de gestión de riesgos sobre una base amplia que cubra a toda la empresa y los negocios.
Este mes de octubre, una orden de “Cesar y Desistir” fue emitida por la Reserva Federal en contra del HSBC por la forma como monitoreaba el cumplimiento ALD en sus líneas de negocios. El mandato indica que el banco debe mejorar las comunicaciones y el proceso de rendición de cuentas entre los gerentes de ambos departamentos, así como desarrollar un proceso para resolver las disputas entre ellos.
Que los gerentes de negocios tengan más poder de decisión que el personal de cumplimiento ALD “es más frecuente de lo que uno esperaría”, afirmó Michael Kelsey, vicepresidente de gestión de riesgos de Capital One. Los bancos han recibido sanciones en casos cuando sus departamentos de cumplimiento “no participaron en los procesos o lo hicieron demasiado tarde”.
En el más reciente manual de examinación de la Ley de Secreto Bancario, los bancos pueden permitir que los gerentes ALD reporten a los gerentes de negocios, particularmente en pequeñas empresas financieras. Haciendo esto, de cualquier forma, crean “riesgos de potenciales conflictos de interés que pudieran reducir la efectividad” de cumplimiento ALD, según indica el manual. También pueden presentarse conflictos en las instituciones financieras extranjeras cuando el personal de cumplimiento le reporta a un ejecutivo o gerente doméstico.
Los departamentos de cumplimientos en las instituciones financieras de gran tamaño deberían operar a través de una oficina central poderosa, separada de la línea de negocios, recomendó un experimentado oficial de cumplimiento de un banco estadounidense, quien agregó que los ejecutivos comerciales frecuentemente “quieren proteger sus carteras de ganancias”, pero esto puede significar grandes problemas financieros y riesgo reputacional como resultado de violaciones de cumplimiento, dijo el empleado que pidió mantener su nombre en reserva.




