La Unidad de Lavado de Dinero de la Procuraduría General mexicana (PGR) investiga al ex presidente guatemalteco Alfonso Portillo por lavado de dinero, una acción tomada en respuesta a una solicitud recibida por las autoridades guatemaltecas, tal y como informó la semana pasada el procurador general mexicano, Rafael Macedo de la Concha.
El ex presidente guatemalteco puede vivir y trabajar en México pero las autoridades mexicanas lo investigan por lavado de dinero.
Según Macedo de la Concha, la investigación contra Portillo fue abierta tras una solicitud de colaboración jurídica tramitada por la Fiscalía contra la Corrupción de Guatemala. El ex presidente Portillo vive en México desde febrero, luego de haber huido desde Guatemala –vía El Salvador—, donde está acusado de lavado y otros delitos presuntamente cometidos en su país.
El procurador mexicano confirmó, en unas breves declaraciones al diario mexicano La Crónica, que se está llevando a cabo dicha investigación. “Ya lo informé en alguna ocasión […] Ese tema lo está viendo la Unidad de Lavado de Dinero únicamente. La información que han solicitado es de carácter de esa naturaleza”, manifestó.
Macedo de la Concha subrayó que las relaciones con el gobierno de Guatemala son “muy estrechas”, por lo que, agregó, “obviamente, siempre estaremos abiertos a todo lo que nos soliciten”. También dijo que hasta la fecha, las autoridades mexicanas no pueden hacer más sobre el caso de Portillo, ya que aún no han recibido de la fiscalía guatemalteca la solicitud de detención para poder extraditarlo.
Por su parte, el diario guatemalteco ‘Prensa Libre’ publicó ayer que la Fiscalía de Guatemala ha encontrado indicios de que parte del dinero, que presuntamente fue saqueado de las arcas nacionales por Portillo y otros funcionarios de su gobierno, podría estar depositado en bancos mexicanos.
Guatemala por ahora no solicitaría la extradición de Portillo debido a que no se ha agotado la pesquisa en el país. “Aún no se ha concluido la investigación en Guatemala, falta atar algunos cabos”, dijo Juan Luis Florido, jefe del Ministerio Público de Guatemala.
El Ministerio Público guatemalteco había solicitado la colaboración de las autoridades mexicanas para profundizar en las investigaciones en torno al ex presidente y otros funcionarios de su gobierno señalados en actos de corrupción cometidos durante aquella gestión.
Algunos investigadores en Guatemala creen que parte del dinero supuestamente robado u originado en actos de corrupción durante el gobierno de Portillo podría encontrarse en México.
El ex presidente guatemalteco puede movilizarse con libertad en México y hace dos semanas consiguió una visa mexicana para poder trabajar en el país. El 17 de agosto, Portillo logró demostrar a las autoridades de inmigración de México que fue contratado como asesor por la empresa de materiales de construcción Bahena, S.A., de C.V., ubicada en el pueblo Chilpancingo de los Bravo, en el estado de Guerrero, para poder acceder a la visa de trabajo.
La nueva visa de Portillo dura un año, pero podría ser renovada si la empresa que lo contrató le renueva el contrato.
Bahena es una concesionaria de la marca Construrama que a su vez pertenece a Cementos de México. Gerardo de la Torre vocero de Cemex, señaló al periódico de Guatemala Prensa Libre que la contratación de Portillo es a título propio de Bahena y negó que CEMEX haya tenido que ver con su contratación.
El Gerente General de la constructora, Francisco Bahena, confirmó su contratación como asesor financiero y explicó que las indicaciones de corrupción contra el ex presidente “son asuntos políticos, debido a que está gobernando la oposición”.




