Por Brian Monroe.
El Departamento del Tesoro de los EE.UU. está reorganizando sus esfuerzos de control de sanciones económicas para concentrarse más en las violaciones notorias que están sujetas a multas de millones de dólares previstas bajo una ley de 2007.
El monto de las multas aplicadas este año (US$10,6 millones) por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro (OFAC, por sus siglas en inglés), ya es tres veces superior a los US$3,5 millones recibidos por las sanciones aplicadas durante 2008. Pero si bien los montos de las multas han aumentado, la cantidad de sanciones en los siete primeros meses de 2009 se redujo al pasar de más de 70 aplicadas durante el mismo período en 2008 a 21, una disminución superior a dos tercios.
Según algunos consultores y ex funcionarios de la OFAC, el hecho de que la mayor parte del dinero obtenido este año provenga de la multa de US$9,4 millones aplicada contra la empresa de mensajería DHL no es una señal de que el caso es excepcional; por el contrario, la multa relativamente elevada es una señal de que el Departamento del Tesoro está dirigiendo su atención a los infractores por cifras importantes, dijeron.
Los cambios reflejan una nueva corriente de la OFAC: “si pueden ir tras el pez gordo, pueden aplicar multas más importantes”, según Cari Stinebower, abogado de la firma Wiley Rein LLP, de Washington, D.C.
Durante el año pasado, la división de control del organismo regulador contrató más personal con experiencia en investigaciones para mejorar el trabajo de fiscalización legal, informó una vocera de la agencia. En general, la OFAC ha “asumido un enfoque más concentrado”, hacia las violaciones severas durante el último año.
En una entrevista realizada en septiembre de 2008, el director de la OFAC Adam Szubin afirmó que el plan de fiscalización según la Ley de Facultades de Emergencia Económica Internacional debió ser reforzado para impedir que las sanciones fueran simplemente un “costo de hacer negocios” para las compañías involucradas, indicó en ese momento.
La agencia también mencionó algunos planes para aumentar el escrutinio de las compañías financieras, de seguros y de mensajería en particular, de acuerdo con documentos publicados por la OFAC y conversaciones mantenidas con funcionarios de la agencia, precisó Stinebower.
Los próximos dos o tres años podrían “traer sanciones importantes en el mundo bancario”, dijo, agregando que los abogados que defienden a las entidades contra las violaciones a las sanciones han notado que los investigadores de la OFAC han presentado casos “más metódicos y analizados” que son difíciles de rebatir.
Nuevas facultades
Esas multas se deberían en gran medida a las facultades de fiscalización convertidas en ley en octubre de 2007 que aumentaron el tope de las multas civiles de US$50.000 a US$250.000, o el doble del monto de la transacción en cuestión, por realizar operaciones comerciales con entidades incluidas en las listas negras, explicó Clif Burns, abogado especializado en multas de la oficina de Washington D.C. de la firma Bryan Cave LLP. Las sanciones criminales se incrementaron de US$50.000 hasta US$1 millón por violación.
Las facultades ampliadas le dieron a la agencia un “martillo más grande” para perseguir de manera más agresiva las violaciones “notorias”, dijo Burns, quien también dirige el Blog Export Law. Las posibles sanciones aplicables dejan “poco espacio para la negociación” cuando la OFAC, después de haber aplicado unas pocas sanciones, puede amenazar con la aplicación de sanciones civiles y penales de millones de dólares.
Las señales de que la OFAC está modificando sus procedimientos fueron evidenciadas por primera vez en septiembre de 2008, con la publicación del documento de 24 páginas que contenía las guías sobre fiscalización, que incluía una lista de violaciones notorias y otras que no son notorias, a ser utilizadas por los funcionarios de la agencia al evaluar las sanciones monetarias civiles. La lista reemplazó la política de fiscalización anterior que incluía la evaluación de factores “agravantes” y “atenuantes”.
En la guía, OFAC pone un mayor énfasis a si una violación fue notoria o intencionada, según explicó Betsy Sue Scott, ex jefa de la división de sanciones civiles de la agencia y actualmente dedicada a la profesión legal independiente en Reston, estado de Virginia.
Los nuevos procedimientos de fiscalización han resultado en “procedimientos internos menos engorrosos por atender infracciones de menor nivel y acciones más rápidas en las más importantes”, indicó la experta, quien agregó que la estrategia anterior de negociar con los abogados de las compañías respecto a si un acto era “atenuante” o “agravante” hacía que el proceso fuera más lento.
Cambiando prioridades
Un elemento que es fundamental y su aplicación es ineludible en el nuevo enfoque de la fiscalización es la decisión tomada en abril por el Departamento del Tesoro de reducir las sanciones aplicadas a las remesas y los viajes a Cuba, según Michael Díaz, Jr., socio gerente de Diaz Reus & Targ LLP, en Miami, estado de la Florida. Con esta medida, la administración de Barack Obama ha “dejado sobradamente claro” que tiene intenciones de redirigir los recursos de la OFAC hacia otra dirección, indicó.
En el caso de las infracciones menores, la agencia probablemente ahora envíe notas de advertencia a los infractores en lugar de imponer multas de unos pocos miles de dólares, dijo Díaz, ex fiscal federal. Como resultado de ello, los investigadores y abogados de la OFAC que antes se ocupaban de esos casos ahora tendrán más tiempo para solicitar “sanciones mucho más elevadas” que podrían estar por encima de los US$100 millones, expresó.
A pesar de los esfuerzos de la OFAC para acelerar la fiscalización de las sanciones menores, los infractores todavía están “recibiendo avisos previos a las sanciones por infracciones cometidas dos y tres años atrás”, señaló Jim Slear, asesor de la firma de abogados Gibson Dunn & Crutcher LLP en Washington D.C., agregando que ese flujo constante de casos de larga data sugiere que todavía hay una gran cantidad de sanciones por aplicar.
Solo después de que la OFAC termine de analizar y aplicar las sanciones menores va a poder concentrar completamente sus recursos de investigación en los casos más importantes, indicó. La amenaza a una empresa internacional con la aplicación de una multa de US$50.000 o incluso US$150.000, “no hará que deje de realizar” actos ilegales que generen ganancias de millones de dólares”.
La OFAC probablemente haya resuelto que es mejor llevar a cabo pocos procedimientos más importantes que reciben la atención de todos, que muchos procedimientos más sencillos que nadie conoce”, dijo
Experiencia en investigaciones
Una figura clave detrás de la estrategia de control actualizada, según algunos funcionarios y empleados internos, es Michael Geffroy, quien asumió como director asistente de fiscalización de la agencia en agosto de 2008, después de trabajar más de dos años como asesor del fiscal general asistente en la división criminal del Departamento de Justicia de los EE.UU.
Geffroy ha asumido un rol activo en la determinación de cuáles casos deberían ser investigados por la agencia y en la suma que podría aplicarse como sanción a las entidades, dijo Stinebower, quien agregó que su antecedentes “destacados” le han ayudado a coordinar las investigaciones y a intercambiar información con el Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Interior.
La frecuencia y los montos con los cuales la OFAC penaliza las infracciones a las sanciones todavía no han mostrado una línea pareja.
En los primeros siete meses de 2006, la OFAC aplicó 16 sanciones por un total de US$332.000, y durante todo 2006 aplicó 32 multas por casi US$790.000. La agencia también detalló en sus cifras correspondientes a 2006 una multa de US$40 millones aplicada contra el ABN Amro por violaciones a las sanciones, aunque la multa fue aplicada efectivamente el 19 de diciembre de 2005.
En 2007, la OFAC sancionó más de 30 infracciones en los primeros siete meses del año, por un total de US$1,4 millón. Durante todo 2007, aplicó 52 sanciones por un total de US$4,3 millones.
Con relación a 2009, la OFAC comenzó el año ayudando en una investigación del Departamento de Justicia que culminó en la aplicación de una multa de US$350 millones contra el banco Lloyds TSB por las acusaciones de que la empresa intencionalmente había ocultado transferencias vinculadas ilegalmente a Irán. El caso mostró una postura agresiva por parte de los Estados Unidos que probablemente continúe bajo la administración Obama, según Stinebower.
En ese momento, los investigadores gubernamentales indicaron que la del Lloyds era solo una de las nueve investigaciones similares realizadas sobre bancos. La OFAC y el Departamento de Justicia no dieron a conocer la condición de esos bancos, y los funcionarios consultados no quisieron hacer comentarios.
En el acuerdo de diferimiento de juicio el Lloyds pagó US$175 millones al Condado de Nueva York y US$175 millones al Departamento de Justicia. La OFAC por lo general trabaja con agencias de fiscalización legal federales en los casos más importantes vinculados a sanciones, según una declaración realizada por un funcionario de la agencia.




