La Organización de las Naciones Unidas publicó la semana pasada sus recomendaciones finales sobre la forma en que los estados miembros deberían elaborar legislación para combatir el lavado de dinero y la financiación del terrorismo, incluidas algunas disposiciones para decomisar bienes delictivos.

La Oficina Sobre Narcóticos y Delitos de la ONU (UNODC, por sus siglas en inglés) completó las recomendaciones en abril y trabajó con consultores del Fondo Monetario Internacional y del Secretariado del Commonwealth.


La guía, conocida como las “disposiciones modelo” de la organización, actualiza las recomendaciones publicadas en 2003 y tiene como objetivo el ser utilizada como “base legislativa” por sus miembros, indicó la UNODC.


El documento de 164 páginas analiza la manera en que los países deberían elaborar leyes y regulaciones sobre los delitos relacionados, las unidades de información financiera, las transferencias transfronterizas y las confiscaciones de bienes delictivos.                 


Los gobiernos que deseen utilizar las recomendaciones “deberían tener cuidado para adaptar los conceptos subyacentes y el lenguaje específico” a sus sistemas legales, según las recomendaciones.


La UNODC señaló que basaba sus recomendaciones en las 40 + 9 recomendaciones del Grupo de Acción Financiera (GAFI), así también como en las mejores prácticas.               
Las normas de la UNODC, sin embargo, se extienden más allá del alcance de las recomendaciones del GAFI, ya que sugieren un enfoque legal para los decomisos criminales y las confiscaciones civiles, informó la organización.