Por Gonzalo Vila
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Los profesionales antilavado se encuentran en una encrucijada que los pone bajo un estrés sin precedentes: han visto crecer sus tareas y la responsabilidad que acarrean en forma exponencial en los últimos años, pero sus recursos continúan siendo los mismos.

Los especialistas antilavado ahora realizan muchas más tareas y tiene más responsabilidad, mientras las expectativas por parte de los altos directivos y los reguladores continúa en crecimiento, lo que afecta su rendimiento en el trabajo, según un estudio realizado por la Asociación de Especialistas Certificados en Antilavado de Dinero (ACAMS por sus siglas en inglés).

Los resultados del estudio, que tiene serias implicancias para la industria ALD, fueron presentados ayer en la apertura de la 5ta Conferencia Anual de ACAMS en Las Vegas.

Entre las crecientes tareas diarias de los profesionales antilavado se encuentran la de reconocer la estructuración; identificar los riesgos asociados con la financiación del terrorismo; reconocer los métodos utilizados por bancos e instituciones no bancarias; y realizar un continuo entrenamiento tanto del personal antilavado como del resto de la planilla de la institución.

Pero más allá de todas estas tareas, las que más estresan a los profesionales según el estudio, son:

  • Responder a los resultados de las auditorías—internas y externas—, documentar las respuestas y tomar las medias apropiadas.
  • Integrar las mejores prácticas y crear una cultura de cumplimiento para toda la estructura de una institución.
  • Crear, desarrollar e implementar políticas, procedimientos y control antilavado.
  • Comunicar temas con la alta gerencia de la institución.

Los profesionales en la conferencia de ACAMS profundizaron sobre las responsabilidades y presiones sobre los profesionales ALD en la actual cultura de cumplimiento y la repercusión de este aumento de las obligaciones laborales en la salud y el correcto desempeño de los profesionales.

Un elemento que provoca mucho estrés es la relación que deben mantener  – y las respuestas que deben dar – a los auditores y examinadores. “Uno de los consejos que puedo dar para alivianar esta carga es que inviten a los examinadores a sus sesiones de entrenamiento y poder crear de esta manera una mayor base de credibilidad con ellos”, dijo Barry Koch, director global de antilavado para American Express.

Las expectativas y las responsabilidades continúan creciendo, como por ejemplo poder identificar los mecanismos utilizados por los terroristas para financiar sus operaciones. “No sé cómo lo vamos a realizar, como profesionales antilavado estamos obligados a saber cómo se financia el terrorismo pero es una tarea extremadamente difícil”, dijo Richard Small, líder antilavado de GE Money, pero agregó que estas grandes responsabilidades no deben bloquear el alto rendimiento que se espera de cualquier oficina y oficial antilavado.

Ayuda profesional

Jeff Daum, psicólogo y presidente ejecutivo de Competency Management Inc., una firma de recursos humanos en Henderson, Nevada, señaló que el estrés de los profesionales antilavado no es distinto al de otros profesionales que se ven o se sienten superados por las demandas de su trabajo.

El estrés que sufren  se debe a un agotamiento emocional y a una fatiga física, pero no todos los profesionales responden de la misma manera a un mismo estímulo de trabajo, ya que el ciclo del agotamiento tiene una estrecha relación con la personalidad del profesional y la exigencia percibida de la tarea a realizar. Cuando estos dos elementos no se equilibran, dijo Daum,  “existe una disfuncionalidad que afecta al correcto desempeño de la tarea y a una insatisfacción personal”.

El equipo de trabajo es la clave

Para evitar el estrés, que en última instancia afecta las operaciones, los panelistas dieron una serie de consejos para los profesionales. El primer lugar, dijeron, se deben  priorizar las tareas a realizar y no intentar solucionar todos los problemas. Otra clave es poder interpretar los signos del estrés y poner límites. Además, es importante aprender a delegar tareas, discutir los temas con el equipo de trabajo y más importante aún con los altos ejecutivos.

Ayudará también a alivianar el peso del trabajo contar con el mejor equipo de trabajo posible y para ello es tan importante saber contratar personal como hacer el mayor esfuerzo para que los mejores empleados no se vayan de la institución. “Un buen reclutador puede ahorrar mucho tiempo y ayudar infinitamente a las operaciones antilavado”, dijo Koch.

Es inevitable que el oficial antilavado experimente mucha tensión en su trabajo, dijo Koch, pero que uno de los mecanismos que puede facilitar el trabajo de los profesionales en ésta área es una clara distribución de las responsabilidades.