La Superintendencia de Bancos de República Dominicana retiró la licencia de operaciones a 56 casas de cambio y remesadoras, debido a irregularidades que presentaban en el manejo de recursos de terceros, además de presentar debilidades en sus controles operativos.
El organismo regulador informó que los negocios de servicios monetarios (NSMs) estaban operando sin la autorización necesaria para intermediar con los recursos de terceros, incumpliendo de esta forma con las regulaciones establecidas por el organismo.
Voceros de la institución le indicaron a medios de comunicación dominicanos que las entidades financieras y las empresas cambiarias tendrán que modificar sus topes en las transacciones y tendrán prohibido entregar remesas familiares en divisas, con lo cual se busca limitar las operaciones de legitimación de capitales.
La Superintendencia de Bancos informó que en los próximos días serán clausuradas otras 10 empresas, lo que significará una reducción en el mercado de NSMs del 60%, al pasar de 110 empresas registradas a solo 44.
Cambia mercado de remesas
El Superintendente de Bancos, Haivanjoe NG Cortiñas, informó que en el mercado de divisas de República Dominicana ha habido un cambio de la participación de las entidades debidamente autorizadas a operar en el mercado, pasando las entidades financieras de una participación en el año 2004 de 50%, al 81% en el 2010.
NG Cotiñas observó que “en cambio en el año 2004 los agentes de cambio tenían una participación de un 50% y hoy día, a agosto de 2010, tienen una participación de alrededor de un 19%”.
Destacó que el año 2004, en la economía dominicana, a nivel de divisas, el monto era de US$1.579 millones, mientras que al 2009 ese monto es de US$23.659 millones, lo que representa el 58% del Producto Interno Bruto (PIB).
Observó que el crecimiento se explica en el incremento de las transacciones de las entidades de financieras, las cuales aumentaron en US$12.414 millones, equivalente a un 202%. Mientras que en los agentes de cambio las operaciones de compra disminuyeron US$335 millones, lo que es igual al 5.8%.
NG Cortiñas atribuyó los cambios dados en la estructura del mercado cambiario dominicano al mayor número de intermediarios registrados, las ventajas tecnológicas, la cobertura, la disponibilidad de efectivo y la estructura de costo de las entidades financieras.
En relación a las revisiones In-Situ, el pasado mes el mismo Superintendente informó que en las supervisiones en las entidades de intermediación financiera y cambiaria se fiscaliza todo el proceso regulatorio sobre gestión preventiva de lavado de activo, recomendando planes estrictos de fortalecimiento para aquellas entidades que presenten debilidades en sus controles internos.
La Superintendencia de Bancos, dijo el funcionario, se ha mantenido realizando supervisiones Extra-Situ e In-Situ, reforzando los controles y las prácticas de supervisión en materia de monitoreo, prevención y seguimiento de cualquier tipo de transacción sospechosa.
Agregó que sobre la base de las informaciones se ha iniciado el desarrollo de un sistema de administración de riesgo contra el lavado de activos y el financiamiento al terrorismo, en la que se definen factores de riesgos que servirán de insumos para que las entidades bajo la supervisión de la Superintendencia puedan medir sus riesgos en función de los perfiles financieros de los clientes.




