Por Brian Monroe.
Cuando las grandes economías del mundo enfrentan problemas, la devaluación de las monedas es una de las principales angustias para los gobernantes y dirigentes macroeconómicos… pero también lo es para los grupos criminales.
Desde que se inició la crisis financiera global en el año 2008, las monedas más importantes del mundo han llegado a fluctuar hasta en un 30% de su valor., tal ha sido el caso del euro, el rubro ruso, la libra esterlina de Inglaterra, el naira nigeriano, el won surcoreano y el dólar estadounidense también ha variado.
Esas fluctuaciones, que generaron una salida de capital en distintas jurisdicciones, representarán desafíos para los oficiales de cumplimiento antilavado de dinero (ALD) quienes deben analizar transacciones provenientes de esas regiones y determinar cuáles provienen de lavadores y evasores fiscales, señaló Kenneth Rijock, consultor financiero de la empresa World Check, de Londres.
”Sin perjuicio de qué clase de inversor sea o que se utilice dinero limpio o sucio, preservar el capital es la prioridad Nº 1”, indicó Kathy Lien, directora de investigaciones de la firma de cambio de divisas Global Forex Trading, en el estado de Michigan (EE.UU.). “Una moneda más débil puede tener impacto sobre el lugar donde los criminales elijan colocar su dinero”.
El cambio en las valuaciones globales es un “importante obstáculo” en lo que ha sido una baja importante en el valor relativo de la moneda estadounidense y un flujo constante de dinero sucio y limpio convertido en euros y monedas asiáticas, explicó Rijock.
Como resultado de ello, los bancos estadounidenses podrían encontrarse ante el surgimiento de un flujo de dinero proveniente de Rusia, Europa y otras regiones, y deberían ir más allá en el cumplimiento de las prácticas estándar de diligencia debida aplicables a clientes y negocios de estos países, indicó Rijock, agregando que aún aquellas transacciones que aparenten ser de rutina podrían involucrar a compañías pantalla, lavadores de dinero y evasores impositivos.
Las metodologías clásicas predominan
Se estima que entre US$850.000 millones y US$1 billón de fondos ilegales salen anualmente de Rusia, Europa, el Medio Oriente y Asia para adquirir bienes extranjeros, convertirlo en dólares o colocarlo en paraísos de secretismo offshore, según un informe del 5 de enero de 2009 sobre flujos ilícitos elaborado por el programa de Integridad Financiera Global, integrante del Centro de Política Internacional en Washington, D.C.
Las tácticas que emplean los grupos del crimen organizado para movilizar sus fondos ilegales son similares a muchas de las técnicas clásicas de lavado de dinero, incluido el cambio de precios en el comercio internacional, las transacciones ilegales realizadas a través del “hawala” y el contrabando de dinero en efectivo, según el informe. En algunos casos, miembros de la mafia rusa crean “compañías de un día” para realizar un conjunto específico de transacciones, indica el informe.
En otros casos, las jurisdicciones detectan las transacciones más importantes a través de las fluctuaciones del monto que tienen algunos de los regímenes ALD más débiles o que tienen antecedentes por haber estado muy involucrados con delitos y corrupción.
La amenaza rusa
Rusia ha reforzado sus leyes ALD desde que se produjera la primera condena por lavado de dinero en 1997, pero aún tiene una gran cantidad de deficiencias regulatorias, incluidas la falta de normas sobre la obtención de la identidad de los dueños beneficiarios de las cuentas, el congelamiento de activos y la habilitación de las remesadoras de dinero, según un informe de junio de 2008 publicado por el Grupo de Acción Financiera, organismo que fija los estándares ALD globales.
“Esta es una buena oportunidad para los lavadores de dinero”, especialmente en Rusia, dijo Rijock, ex abogado condenado por lavado de dinero en 1990. “La salida de capitales rusos está alcanzando niveles record, dificultándoles a los bancos estadounidenses el análisis de los flujos de dinero de las operaciones en Rusia o con cuentas corresponsales vinculadas a esa nación”, señaló.
Solo en el tercer trimestre de 2008 la salida de capital de Rusia alimentada por la baja en el precio del petróleo y la depreciación del rublo se incrementó llegando a superar los US$130.000 millones, según cifras del Banco Central Ruso. Un tercio de ese monto tuvo un origen delictivo, según un informe de la Oficina de las Naciones Unidas para el Control de Narcóticos y Prevención del Delito referido al Capitalismo Ruso y el Lavado de Dinero.
La baja en los precios del petróleo “cambió toda la ecuación” y generó la correspondiente caída de los valores de las divisas en todo el mundo, señaló Elaine Carey, directora nacional de investigaciones de la oficina de Los Ángeles de la consultora de administración del riesgo Control Risks.
A su vez, la crisis hipotecaria en los Estados Unidos y la caída en el gasto realizado por los consumidores estadounidenses contribuyeron a la correspondiente caída de la demanda de los productos en Asia e India, ocasionando una mayor caída aún del valor de las monedas, agregó Rijock.
Las recomendaciones de cumplimiento ALD
Para detectar mejor las transacciones sospechosas, los oficiales de cumplimiento bancario de los EE.UU. deberían estar atentos al incremento en la cantidad de transacciones de bancos corresponsales en regiones en las que anteriormente había pocas operaciones, indicó.
Más allá de eso, los bancos deberían analizar a aquellos clientes nuevos provenientes de regiones con las “nunca hayan tenido antes vínculos comerciales” y tratan de realizar “operaciones por montos importantes o inusuales”, expresó Rijock. “Esto se traducirá en una gran cantidad de dinero nuevo ingresando a los Estados Unidos y Europa”.
Además, los criminales podrían estar explotando las preocupaciones económicas que pudieran tener los cajeros de los bancos en aquellas regiones donde el valor de la moneda se depreció, ofreciéndoles sobornos para falsificar información de las transferencias, dijo Carey.
Los lavadores y los evasores impositivos que tratan de salir de una divisa débil tienen varias opciones que pueden elegir, incluido el uso de bancos con controles ALD poco rigurosos o los vínculos con el crimen organizado. También la compra de fondos en mercados de cambio de divisas o el mercado negro, dijo Edwin Truman, integrante del Instituto Petersen para la Economía Internacional, en Washington, D.C.
Cuando varias monedas se tambalean al mismo tiempo les da a los criminales “más incentivo para movilizar su dinero” antes de que se produzcan más devaluaciones, expresó.




