Por: Fernando Martínez
Se vence el plazo para que todas las sociedades financieras de objeto multiple (Sofomes) reguladas en México renueven su registro ante la Comisión Nacional para la Protección de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), para ello deberán obtener ante la Comisión Nacional Bancaria de Valores (CNBV) un dictamen técnico que certifique que cumplen con políticas ALD/CFT.
Las sofomes que no obtengan el registro dejarán de tener licencia para operar, pero la tendencia de acuerdo con los reportes de algunas consultoras antilavado, es que las Sofomes se están convirtiendo en empresas de Sociedad Anónima (SA) para evadir el costo que implican estas nuevas regulaciones. De esta manera no están obligadas a reportar sus operaciones y hacer frente a las regulaciones establecidas por la Comisión Nacional Bancaria de Valores (CNBV).
Se calcula que existen cerca de 3.400 de estas sociedades en México, ya más de 600 se convirtieron en Sociedades Anónimas.
La Asociación Mexicana de de Entidades Financieras Especializadas (AMFE) aseguró que las 35 Sofomes más grandes del país ya cuentan con el dictamen técnico en materia de lavado de dinero por la CNBV.
Pero las entidades financieras que cambiaron su figura legal de igual manera en materia de prevención antilavado, serán supervisadas por la Unidad de Inteligencia Financiera.
Fuentes anónimas dijeron a Lavadodinero.com que las nuevas disposiciones implican una “sobreregulación que saca del juego a entidades financieras pequeñas”.
La regulación
En el último trimestre de 2014 se emitieron las disposiciones para la certificación de auditores externos independientes, oficiales de cumplimiento y demás profesionales en materia de prevención de operaciones con recursos de procedencia Ilícita y financiamiento al terrorismo en México como una medida de fortalecimiento a los procesos preventivos ya establecidos.
La certificación aplica directamente a oficiales de cumplimiento de las instituciones que integran el sistema financiero mexicano, así como a las firmas de auditores externos que prestan sus servicios en la materia.
La certificación nace con la finalidad de establecer un estándar en el perfil de aquellos quienes desempeñan en el día a día las funciones de prevención de lavado de dinero, asegurando así, que las medidas impuestas por el regulador en la materia, serán aplicadas de manera profesional.
A partir de junio de 2015, oficiales de cumplimiento y auditores externos, de acuerdo con el cronograma, debían iniciar un proceso de certificación, comenzando con las instituciones de crédito, casas de bolsa y Sofomes.
Entidades reguladas
De acuerdo con el web oficial de la CNBV, estas sociedades financieras reguladas son aquellas que tienen vínculos patrimoniales con sociedades financieras populares, sociedades financieras comunitarias o sociedades cooperativas de ahorro y préstamo, en adición a aquellas que mantienen vínculos patrimoniales con Instituciones de Crédito. Además, se agregan a este régimen de entidades reguladas, las Sofomes que para fondear sus operaciones emitan valores de deuda inscritos en el Registro Nacional de Valores conforme a la Ley del Mercado de Valores.
Depuración del mercado
Miguel Tenorio, experto antilavado dijo a Lavadodinero.com que “aquí el tema que va a detonar es una decantación de aquellos que hacen operaciones con gente que no ha sido capacitada. Creo que la regulación obedece a la falta de atención que le han dado algunos intermediarios financieros a meter gente que no está preparada para ser oficial de cumplimiento”.
Insistió en que hay casos en donde las organizaciones son muy pequeñas y pueden llegar al extremo de poner a una secretaria en esta posición, sin ninguna preparación, solo porque es un requerimiento legal. Como no se ha logrado que las entidades que participan en el mercado tengan oficiales de cumplimiento capacitados, el gobierno ha establecido este mecanismo con la intención de que los obligue, cuanto menos, a pasar los requerimientos mínimos establecidos por la autoridad.
Tenorio avizora que las propias organizaciones que no cuenten con elementos suficientes para estar en el mercado y con personal altamente calificado para desarrollar esta labor, tendrán que salir del mercado.




