Por el Departamento Editorial. 
Aunque durante los últimos 10 años se han aplicado controles y se han emitido advertencias sobre los riesgos de las tarjetas de regalo y las prepagadas -conocidas en inglés como gift cards y prepaid cards-, las autoridades de Estados Unidos han detectado que durante el año los casos reportados de estafas mediante estos instrumentos financieros se han incrementado en un 270% en comparación al año anterior.
Estas tarjetas son atractivas para los estafadores porque les ofrecen anonimato y una vez que se usan, es muy difícil revertir la transacción. Eso se debe a que las tarjetas de regalo son como dinero el efectivo, que una vez usado no puede recuperarse.
Otro beneficio que es muy conveniente para los estafadores es la capacidad de recarga de algunas tarjetas. De esta forma, los estafadores exigen a sus víctimas que “recarguen” (transfieran fondos) a tarjetas que tienen en su poder y una vez depositados los fondos son inmediatamente usadas para adquirir bienes y/o pagar por servicios. Muchas veces, las tarjetas son vaciadas mediante puntos de pago que son controlados por los delincuentes.
En el caso de Estados Unidos, es común que los delincuentes les pidan a sus víctimas que adquieran tarjetas reconocidas, como las de iTunes, Google Play o Amazon.
Muchas veces el delincuente se mantiene en contacto telefónico con la víctima y le exige los datos de la tarjeta (número y código de seguridad) a penas la compra. Inmediatamente el delincuente realiza cualquier transacción electrónica para extraer el dinero o adquirir un bien.
Tipos de estafas asociadas a las tarjetas prepagadas
Según los registros de fraude de la Comisión Federal de Comercio es común que las tarjetas prepagadas y las de regalo sean exigidas como forma de pago en los siguientes casos:
· Un falso representante de la autoridad fiscal contacta telefónicamente a una persona o negocio exigiendo un pago inmediato de impuestos atrasados o una presunta multa.
· Un falso representante de una empresa de soporte técnico exigiendo un pago por la reparación de un artefacto (computadora, teléfono, televisor, etc.) o por la extensión de una garantía.
· Un individuo contacta a la víctima y le dice ser amigo de un familiar que necesita dinero urgente.
· El estafador finge trabajar para una compañía de servicios públicos y exige el pago de su factura con una tarjeta de regalo para evitar el corte del servicio eléctrico o de agua.
· Un individuo se presenta como representante de una empresa que maneja sitios web de subastas y pide tarjetas de regalo como método de pago para “comprar” artículos costosos como carros, motocicletas, embarcaciones, tractores y artículos electrónicos.
· El defraudador dice ser un militar que tiene que vender un producto rápidamente antes de que lo desplieguen a su comisión de servicio y que necesita recibir el pago con una tarjeta de regalo.
· La persona dice ser el ganador de un premio de lotería, pero necesita hacer unos pagos en tarjetas prepagadas antes de recibir su dinero.
· Un individuo contacta al vendedor de un producto (mayormente pasa con ventas online) y le dice que le enviará un cheque por un monto superior al precio de venta del producto, pero al mismo tiempo le exige que la diferencia se la envíe en una tarjeta de regalo. Generalmente el cheque es falso.
