Por Ryan J. Talbot, CAMS
Agente Especial, IRS-CID

El lavado de dinero frecuentemente es una consecuencia del robo de un empleado, cuando las ganancias malhabidas son ocultadas para evitar su detección.  Pero si usted conoce a su cliente y sigue el camino del dinero, pueden detectarse las inconsistencias e informar las actividades sospechosas a las autoridades.


Tomemos, por ejemplo, el caso de Maximilian (Max) Lauw, ex jefe operativo de un productor de artículos de madera en Virginia, y un defraudador:
Lauw malversó más de US$700.000 desviando los fondos procedentes de las ventas de los productos que robaba del inventario de su empleador.  Él transmitía los fondos ilegales producto de las ventas a través de transferencias cablegráficas a cuentas bancarias de cómplices en Indonesia, así también como a su propia cuenta bancaria en Indonesia y luego a su cuenta corriente personal conjunta en los Estados Unidos.  Estas transacciones deberían haber sido consideradas sospechosas por los bancos de EE.UU.


Max Lauw había trabajado durante mucho tiempo en Barber & Ross (B&R), un productor de madera con sede en Leesburg, Virginia.  Durante más de 20 años, Lauw tuvo varios cargos, eventualmente asumiendo la responsablidad de la subsidiaria indonesia de B&R y de su mayor proveedor, PT Profilindah, en 1999.  PT Profilindah fue creada por B&R para fabricar y proveer exclusivamente a la compañía con productos de madera terminados.  En ese puesto, Lauw supervisaba alrededor de 800 empleados de producción y entre 40 y 50 empleados de oficina.  No pasó mucho tiempo antes de que Lauw comenzara a beneficiarse a costa de su empleador y a obtener ganancias personales desde su cargo.


En al menos 14 ocasiones entre diciembre del 2000 y diciembre del 2001, Lauw utilizó ilegalmente las instalaciones, materiales y trabajo de PT Profilindah – todo lo cual había sido pagado con anticipos provenientes de B&R y destinados exclusivamente para su uso por parte de B&R – para vender productos de madera a otros dos productores de madera de EE.UU.  En cinco de esas oportunidades, Lauw vendió ilegalmente productos a la sucursal de Maryland de una compañía de construcción importante, Builder’s First Source (BFS).  En las otras nueva ocasiones, vendió ilegalmente productos de madera vendidos a Houston Stained Glass.  BFS y Houston Stained Glass pagaron a Lauw un total de US$717.000, que él desvió para su uso personal.


Lauw vendió los productos a BFS a través de un corredor, que era dueño de una compañía, Gemroi, en Fredericksburg, Virginia.  BFS generalmente pagaba al corredor y/o a Gemroi al recibir el envío de la mercadería.  Gemroi luego deducía una comisión por la venta y transfería cablegráficamente los fondos netos desde la cuenta bancaria personal del corredor a la cuenta bancaria personal de Lauw en la Sucursal del Hong Kong y Shanghai Banking Corp. (HSBC) en Surabaya, Indonesia.


Ruta tortuosa hacia EE.UU.


Para ocultar la naturaleza de los fondos, Lauw ocasionalmente instruía a Gemroi y Houston Stained Glass a que transfirieran los fondos ilegales del plan de malversación en la cuenta personal de dos cómplices en Indonesia.  Ellos luego transferirían los fondos a su cuenta bancaria personal en el HSBS en Indonesia.  Entre el 6 de abril del 2001 y el 25 de septiembre del 2001, los cómplices de Lauw realizaron seis transferencias por un total de US$298.484,47 de los fondos malversados en la cuenta de Lauw en el HSBC en Indonesia.  Lauw posteriormente transfirió una porción importante de los fondos ilegales desde su cuenta en el HSBC en Indonesia a una cuenta que tenía en forma conjunta con su esposa en los EE.UU., ocultando más aún el rastro del dinero de Houston Stained Glass y de BFS.


Entre el 12 de octubre de 1999 y el 4 de febrero del 2002, Lauw transfirió cablegráficamente US$238.805 de su cuenta en el HSBC en Indonesia a la cuenta corriente conjunta que tenía con su esposa en el norte de Virginia.  Lauw luego retiraba de su cuenta sumas grandes de efectivo, entre US$8.000 y US$10.000 en varias ocasiones, y utilizaba gran parte de los fondos ilegales para pagar gastos personales, incluyendo los US$45.000 de la compra del BMW 530iA y los US$88.000 que costó su Porsche Cabriolet 2002.


Desde junio del 2001 a febrero del 2005, Indonesia formaba parte de la lista de Países y Territorios No Cooperadores (por sus siglas en inglés, NCCT) del Grupo de Acción Financiera (GAFI), que identifica las reglas y prácticas perjudiciales que llevan a puntos débiles críticos en los sistemas ALD y a la falta de cooperación internacional en la persecución de estos delitos.


Surgen señales de alarma


El hecho de que Lauw envió transferencias desde su cuenta en el HSBC de Indonesia a su cuenta corriente en EE.UU., en combinación con sus retiros frecuentes de dinero en efectivo por montos entre US$8.000 y US$10.000 (justo por debajo del monto mínimo sujeto a reporte de transacciones en efectivo de más de US$10.000) debería haber sido una señal de alarma para su banco.  Si la actividad normal de su cuenta era un depósito directo semanal de su salario en B&R, una entrada súbita de transferencias cablegráficas por montos importanes desde su cuenta en Indonesia seguidas por grandes extracciones de efectivo debería haber hecho que el banco solicitara más información sobre la naturaleza y fuente de las transferencias.


Qué pasos internos tomó el banco para pedir la información a Lauw u otras fuentes y si el banco presentó o no un informe de actividad sospechosa (IAS) sobre la actividad de la cuenta de Lauw son desconocidos por el autor de este artículo. Igualmente sería ilegal para el autor dar a conocer si se presentaron o no IASs.


Como resultado del fraude, la pérdida total sufrida por R&B fue de alrededor de US$782.894, incluyendo los US$717.000 que Lauw obtuvo mediante las ventas no autorizadas a BFS y Houston Stained Glass, así también como los US$65.894 en impuestos al valor agregado impagos derivados de las ventas no autorizadas.  B&R también sufrió la pérdida de mercaderías, que no fue incluida en el monto de la pérdida atribuible a Lauw.


En junio del 2004, Max Lauw se declaró culpable de un solo cargo de lavado de dinero, específicamente el del Título 18 U.S.C., 1956 (a) (2) (B) (i), en la Corte Federal de Distrito del Distrito Este de Virginia. Esta ley también es conocida como la “punta internacional” del lavado de dinero.  Penaliza la transferencia de fondos derivados de una actividad ilegal específica (AIE) hacia o desde los Estados Unidos.  Para que una transacción financiera sea considerada en violación de las leyes de lavado de dinero de los EE.UU., debe involucrar fondos AIE.  La AIE en este caso fue la transferencia cablegráfica.  Para conocer la lista completa de AIEs, consultar el Título 18 U.S.C., 1956 (c) (7).


Temporada en prisión y restitución


El acuerdo de culpabilidad ordenó a Luaw pagar a B&R la restitución de US$782.894.  Lauw fue finalmente sentenciado a 46 meses de prisión.  Los bancos nunca fueron sancionados.


En el caso de Max Lauw y otros defraudadores, donde quien comete el delito es un empleado de una compañía (la víctima) y recibe regularmente un cheque por el pago de su salario de su empleador (y actualmente es un depósito directo en su cuenta bancaria), los depósitos súbitos de grandes sumas de dinero en sus cuentas bancarias, especialmente transferencias cablegráficas originadas en países de la lista NCCT GAFI, deberían ser señales de alarma para el banco.


De acuerdo con la guía publicada por la Oficina del Comptroller de la Moneda y otras agencias gubernamentales de EE.UU. como la Red de Control de Crímenes Financieros, los bancos deberían presentar IASs con relación a las transacciones que están fuera del ámbito de la actividad normal para el cliente y si el banco no tuviere ninguna explicación razonable para la transacción.  Tener un programa CSC eficiente y un sistema de monitoreo de cuenta para las actividades que se encuentran fuera del rango de transacciones normales ayudará a descubrir a los Lauws (y otros delincuentes financieros) del mundo.


Ver apendices de este artículo:


Siete Señales de Alarma: Detectando a un potencial cliente deshonesto
Conozca a su cliente – o arriesgue pasar vergüenza y sanciones


El Agente Especial Ryan Talbot fue el principal investigador del IRS-CID en el caso Lauw y realizó investigaciones de lavado de dinero que involucraron a una gran variedad de fondos criminales durante su carrera.  Talbtos es especialista antilavado de dinero certificado (CAMS).