La Superintendecia de Casinos de Juegos (SCJ) de Chile puso sus motores en marcha para colaborar con el resto de las agencias que combaten el lavado de dinero.
Tras un convenio de asistencia con el Departamento del Tesoro de EE.UU. a finales del año pasado, ahora firmó un convenio de colaboración interinstitucional con la Policía de Investigaciones de Chile.
Con la firma de convenios, la organización espera poder analizar y estudiar mejor los antecedentes de las organizaciones en el sector de casinos, que deben cumplir con regulaciones antilavado. La idea, que se lleva a cabo a través del Programa Internacional de Asistencia Técnica, es que se puedan investigar a las sociedades que se presentan para administrar casinos, incluyendo a sus accionistas, explicó el Superintendente de Casinos de Juegos de Chile Francisco Javier Leiva a Lavadodinero.com.
“El acuerdo con el Departamento del Tesoro de EE.UU. es un programa de asistencia técnica con el objeto de apoyarnos para la etapa de preclasificación de sociedades para determinar qué antecedentes adicionales nos pueden ayudar en analizar y estudiar las compañías que van a participar en el sector de casinos”, señaló Leiva. En la actualidad siete compañías operan casinos en Chile y se adjudicarán hasta 17 nuevos permisos de operación de casinos.
El acuerdo con la policía de Chile permitirá intercambiar información, planificar y organizar informes e investigaciones, y promover la colaboración entre las dos organizaciones.
El Departamento del Tesoro ayudará a la Superintendencia de Chile a descubrir la idoneidad de los postulantes y también analizar las fuentes de financiación y el origen del patrimonio de las sociedades. “El apoyo del Tesoro es un apoyo metodológico que cuenta con etapas de entrenamiento y capacitación de los profesionales de la Superintendencia con visitas a Chile por parte de expertos del Tesoro”, dijo Leiva.
La SCJ comenzó a funcionar en mayo de 2005 y desde entonces regula el proceso de concursos. Creó un marco normativo que regula la industria de casinos de Chile y lo abrió al mercado. “Es la primera vez que en Chile se abre la industria de casinos con un crecimiento regulado con una fiscalización por parte de la Superintendencia tanto en la etapa de otorgamiento de los permisos de operación como cuando los casinos estén funcionando”.
En la actual etapa de precalificación, la SCJ está implementando dos líneas de trabajo. La primera consiste en determinar si las sociedades anónimas solicitantes cumplen con todos los requisitos legales exigidos para su constitución; y la segunda en analizar los antecedentes personales, comerciales, tributarios y penales de cada uno de los accionistas y de las personas naturales que integran las sociedades postulantes.




