Colombia es el primer país Latinoamericano en adherir al Convenio sobre Lavado, Detección, Embargo y Confiscación de los Productos de un Delito, firmado por los países miembros del Consejo de Europa.

El Congreso de Colombia sancionó esta semana la Ley 1017 a través de la cual el país  adhiere a las provisiones antilavado del convenio, que tuvo lugar en Estrasburgo el 8 de noviembre de 1990.


El documento establece medidas de cooperación judicial para la identificación y seguimiento del producto de un delito para lograr su decomiso.


Al formar parte de este convenio, Colombia debe adoptar medidas tendientes a permitir confiscar e identificar bienes producto de delito. Además, se compromete a cooperar con los otros países firmantes en investigaciones y procedimientos judiciales, entre otros.


Los países firmantes también se comprometen a enviar información acerca de bienes o productos de un delito, cuando consideren que esa información puede facilitar al otro país iniciar o ayudar en investigaciones.


Con respecto a la confiscación, cualquier país que haya recibido de otro una solicitud de confiscación relativa a bienes situados en su territorio deberá solicitar una orden de confiscación del país solicitante para iniciar los procesos.


Relación triangular con Europa


En varios casos en países europeos, incluyendo España, las autoridades han hallado vínculos entre los bienes adquiridos y operaciones de narcotráfico de origen Colombiano. La Oficina para el Control de Activos Extranjeros de EE.UU. ha designado en los últimos tiempos varias compañías en España como organizaciones terroristas por tener vínculos con los carteles del narcotráfico en Colombia.


En el reciente informe emitido por el Departamento de Estado de EE.UU. sobre el lavado de dinero en los países del mundo, España figura como un importante destino de lavado de dinero para los carteles de la droga de Latinoamérica. “Los criminales lavan dinero de todo tipo a través de las inversiones en el sólido mercado de bienes raíces, en particular en las zonas costeras”.


Agrega el informe que el lavado de dinero en España es principalmente producto del comercio de la cocaína de Colombia.


En febrero de 1995, Colombia presentó ante el Consejo de Europa la solicitud formal de adhesión al Convenio. El 19 de febrero de 2004 el Consejo de Europa comunicó mediante Nota Diplomática su decisión de invitar a Colombia a ser parte del mismo.


Ver Ley 1017


Ver Convenio de Estrasburgo